El ‘bloqueo’ de camas, principal causa del colapso en las Urgencias

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife
Pacientes en los pasillos. Camas que se alinean como piezas del Tetris. Ajetreo sin descanso. Caos. Esta es la situación que viven en la actualidad los servicios de urgencias de los dos hospitales públicos de la Isla, principales damnificados de los recortes y las medidas tomadas en los últimos meses por la Consejería de Sanidad del Gobierno canario. Según aseguran los profesionales y sindicatos del sector, mientras el Ejecutivo continúa apelando al discurso de la normalidad, los pacientes se agolpan en los centros de salud y complejos hospitalarios, donde cada vez hay menos personal.
“En el Hospital de La Candelaria hay más de 300 camas bloqueadas, que se ofertan en la concertada; y en el HUC se vive una situación parecida”, afirma Patricia Hernández, delegada de la Federación de Salud de Intersindical Canaria (IC). En su opinión, el mal uso de las instalaciones ha llevado a las Urgencias de los hospitales al “colapso”, una situación que se podría haber resuelto hace tiempo “si se hubieran valorado otras perspectivas”.
En la misma línea se manifiestan desde UGT y el Sindicato Médico (CESM) en Canarias, cuyo secretario general, Carlos Díaz, denota que “la clave de toda esta situación son los recortes, porque si no hay personal y aumentan las listas de espera, la gente acude en masa a las Urgencias, lo que colapsa el servicio”.
Desde el Sindicato de Enfermería (Satse) van más allá, y recuerdan que, aunque la masificación en Urgencias es habitual, “las autoridades sanitarias insisten en considerar estas situaciones como puntuales, con lo cual continúan haciendo caso omiso a las reivindicaciones sindicales y de los profesionales”. “No buscan soluciones efectivas, y la Consejería encima alardea de falsas encuestas sobre el alto grado de satisfacción ciudadana por el servicio que reciben”, recalcan.
En el lado opuesto, desde las Gerencias del HUC y La Candelaria se deja claro que las cifras de atenciones en urgencias son similares a las contabilizadas en este mismo periodo en 2011. “Este repunte se debe al invierno y a los cambios de temperaturas. Un 70% de los pacientes son personas mayores, con patologías crónicas que se agravan por culpa del frío”, sostienen. Además, desde Sanidad niegan “rotundamente” que haya mermado la calidad asistencial o que se produzcan desatenciones en los hospitales públicos de la Isla.
Ideas y promesas
Para evitar la saturación de pacientes en Urgencias, la Dirección del HUC ideó hace un año un proyecto para habilitar un espacio anexo en la antiguas Consultas Externas. Esta opción, que contaba con la aprobación de los profesionales, ha venido tropezando con las limitaciones presupuestarias impuestas a la sanidad pública, hasta el punto de que aún no ha podido llevarse a la práctica. En la Candelaria, mientras, optaron por crear otro apéndice al propio Servicio de Urgencias, derivando los pacientes a una planta habitualmente cerrada (la baja norte) y la número 32 del Tórax.
Paradójicamente, en sus programas de gobierno, tanto el Partido Popular de Canarias como el Partido Socialista prometieron elaborar “planes regionales” para “unificar y coordinar la atención sanitaria urgente”. Mientras, Coalición Canaria afirmó que reforzaría las Urgencias de los centros de salud y ampliaría las de los hospitales. Las tres formaciones, además, apostaron por destinar más recursos económicos y, sobre todo, más personal. “Existen proyectos de ampliación en el Universitario y en La Candelaria y, si hay más espacios, tendrá que haber más personal; así que contemplamos la contratación de más trabajadores”, declaró en mayo pasado la actual directora del Servicio Canario de la Salud (SCS), Juana María Reyes.